LA RELIGIÓN Y LA “MUERTE”
¿NUESTRA ESCALA FINAL?
El tema de la muerte y el más allá es tal vez la única pregunta en común que nos haremos todos en algún momento de nuestra vida.
Cuantas veces nos hemos preguntado cuando fallece algún ser querido, un familiar o simplemente un amigo
¿Qué le sucedió al morir?
¿Dónde estará?
¿Se habrá ido como dicen al cielo?
O tal vez ¿estará en el infierno?
Cuando lo visite en su tumba ¿Me podrá escuchar?
¿Lo puedo ayudar desde acá?
¿Me puede ayudar el a mí?
¿Estará sufriendo?
¿Le sirven las oraciones?
Cuando yo fallezca ¿me podré juntar con él?
¿Lo sentiré igual que como cuando estaba con vida aquí en la tierra?
¿Lo volveré a ver alguna vez más?
¿O simplemente desaparecerá para siempre?
El problema para cualquiera que busca respuestas radica en que cada religión o cada estudio científico nos dan una versión distinta sobre la muerte.
Algunas, las más radicales nos dicen que los buenos se van al cielo y los malos al infierno. Otras menos radicales y más ordenados nos dicen que algunos se van al cielo, otros al infierno y otros a un lugar llamado purgatorio donde superarán las limitaciones que les impide llegar al cielo por ahora.
Otros dicen que solo algunos “elegidos” se salvarán y llegarán a un hermoso lugar llamado cielo donde todos son infinitamente felices y no se conoce envidia ni dolor.
Otras religiones nos enseñan que antes de ir al cielo o al infierno deberemos pasar por un jurado que nos dirá a donde iremos.
Otras nos indican que al morir pasamos por una etapa de descanso y que posteriormente reencarnamos nuevamente en la tierra hasta superar todo aquello que nos limita.
Otros más audaces y modernos dicen que el cuerpo queda aquí en la tierra y que pasamos a formar parte de un universo perdiendo nuestra individualidad.
Otros más modernos aun nos indican que formamos parte de una gran matriz y que somos dirigidos por un ente infinitamente inteligente en relación a nosotros.
Y llenaríamos muchas hojas nombrando las distintas opiniones y enseñanzas de las distintas religiones, grupos religiosos o simplemente científicos.
Observen lo siguiente.
Al parecer cada religión piensa tener el conocimiento y la verdad de lo que nos sucede después de la muerte.
Pero si observan aún mejor podrán percatarse que…
“A pesar que cada religión, tiene su forma de ver la muerte en algo todas coinciden y es lo siguiente”
“CUANDO UNO MUERE UNA PARTE DE NOSOTROS SIGUE VIVIENDO”.
Muchos dicen no sé dónde, ni como, pero sí sé que sigue viviendo.
Y en esta simple frase se puede englobar todo lo que piensan y coinciden finalmente las distintas religiones.
Siempre busquen los puntos en común más que las diferencias.
Respeten a todo aquel que hable en nombre de Dios.
Y nunca digan yo tengo la verdad absoluta.